jueves, 26 de agosto de 2010

La vida de un chico gay



La vida de un chico gay, en cualquier parte del mundo puede ser complicada, pero ¿No somos nosotros mismos los que nos la complicamos? Yo se que a nivel familiar y de trabajo todavía hay gente homofóbica, pero también hay que darse a respetar. El que te cuestione lo haces en la cama, o te insinué algo, pregúntale qué hace él con su mujer en la cama. Y cuando te diga no te importa, dile tú lo mismo.Pero a lo que voy, no es para hablarles sobre nuestra contraparte heterosexual, quiero hablarles de nosotros mismos. Qué muco nos complicamos la vida la gente gay. Nuestras relaciones sobre todo. Se ha puesto de moda, aunque por muchos años se ha hecho, ahora es que más se escucha abiertamente sobre el tema, las parejas que tienen relaciones abiertas. ¿No es ya suficientemente complicado llevar una relación como para agregar terceros? Hasta ahora, no he conocido una pareja que lleve una relación abierta que no haya tenido los más grandes problemas a consecuencia de esta elección.No digo que esto sea malo, lo menos que quiero es juzgar, cada pareja debe escoger lo que funcione para ellos. Pero hay que estar bien claros en las reglas de un juego tan peligroso como este para que funcione. Si las reglas no están bien claras, o hay duda de parte de alguno de los integrantes, “¡¡¡HEEELLLOOO!!!” no se metan.

miércoles, 25 de agosto de 2010

Aparentar no es vida para los gay


Y como asi de que tiene novio y se sigue enrollando con chicas? Pues mucho no lo debe de querer, la verdad... Quiza lo hace para aparentar ante sus amigos, para que no sospechen lo que es. Pero es que es absurdo. Mira que no hay nada oculto entre cielo y tierra, y si su novio se llega a enterar de lo que hace, ese chico va a perder su pareja. De todas formas, como dice lapiz, creo que deberias contarnos como va tu relacion de amistad con el, y esas cosas. A ver si podemos ayudarte algo mas.

Hombre que nace torcido jamas su tronco enderesa



"...ofrecer cura a los homosexuales que piden un cambio en su orientación sexual no es, en mi opinión, ético. Hay evidencia, como la que se revisa en este trabajo, que terapeutas puieden ayudar a algunos individuos a cambiar su conducta por un período de tiempo. La duda permanece si es beneficioso para el paciente el cambiar su conducta hacia algo que no es consecuente o congruente con su orientación sexual."

A los gay de hoy nos toca abrir la puerta


Muchos cuestionan si las marchas del gay pride sirven de algo. Yo creo que sí. Porque hacerlo es festejar y demostrar lo que mucho quisieran mantener oculto. A los gays de hoy nos toca abrir la puerta, para que las futuras generaciones no tengan que vivir ocultos y angustiados. Es nuestra responsabilidad romper la ignorancia y los odios irracionales. Yo estoy seguro que algún día dejaran de existir las marchas gays, ya no serán necesarias porque ser gay será --como debe ser- sólo una orientación. Algo con lo que se nace. Nada extraordinario. Ser gay es lo mejor que me ha pasado en la vida. Me ha convertido en una mejor persona. Tolerante, respetuoso, dispuesto a no juzgar, y a escuchar otras versiones. Me ha hecho romper mis miedos, enfrentar mis pesadillas, ser una persona más libre. Un hombre que disfruta ser hombre, y ama estar rodeado de ellos.

martes, 24 de agosto de 2010

DESDE MI PC PA LOS GAY."Quiero hacerte feliz"



Desear el bien es desear felicidad. Desear el bien para otra persona es buscar su felicidad. Haremos esta reflexión en la forma directa, como si un novio o una novia lo estuviera diciendo: “Cuando me preguntan por qué me caso contigo, lo primero que me viene a los labios es “porque quiero hacerte feliz”. Pero, enseguida reflexiono más en profundidad y me viene la pregunta: “¿qué significa hacer feliz a una persona?”. En nuestro caso “¿cuál es la felicidad que te prometo y para cuya consecución me comprometo para toda la vida?” Sé que tengo que superar un modo de ver meramente pragmático, fruto, como nos dice el Papa, del positivismo agnóstico y utilitarista de nuestro tiempo, que es incapaz de reflexionar “metafísicamente”. Tengo que llegar al misterio de tu persona.

miércoles, 11 de agosto de 2010

EL BLOGGER GAY MAS VISITADO



Este tema es bastante polemicooo, muchos puntos de vista que evidentemente amplian nuestro panorama de las cosas...

creo que la gran mayoria de los gay, bisexuales y heterosexuales, nos damos cuenta de nuestras preferencias sexuales desde pequeños... yo puedo decir que sé que onda conmigo desde los 7-8 años mas o menos, evidentemente yo no sabia si lo que sentia era bueno o malo, si estaba bien o no, solo lo sabia y claro, lo guardaba para mi...

en mi familia siempre fueron estrictos en ese tema, llamaban a los gays 'pobrecitos', 'raros', 'anormales' y bueno, la palabra bisexual ni la conocían...

pero yo nunca me considere asi, evidentemente yo siempre pensé que lo 'malo' era ser 'afeminado' para ser mas preciso... ahora me doy cuenta de que en verdad nada es tan malo como parece, que cada quien es libre de hacer de su vida lo que mejor le parezca...

concretamente, pienso que ya nacemos con ese 'don', es algo natural, no lo sé, no es algo que podamos controlar... podemos fingir, actuar, disimular... pero jamás engañaremos a nuestro yo interno...

no creo que existan hombres que 'se hagan' gays/bisexuales, apuesto en que en algun recondito lugar de su ser saben que onda, digo, estamos hablando de nuestra sexualidad!, pero claro, solo ellos pueden descubrirlo...

viernes, 6 de agosto de 2010

Los miedos de los gays ante la vida




La soledad, la interminable búsqueda del hombre ¿ideal¿; mentiras e infidelidades disfrazadas de dulzura; desconfianza e historias de múltiples encuentros y hasta desencuentros. Sentimentalmente ¿a qué le temen los gays?

Cuánto miedo puede haber después de tantos golpes en el alma, de estar en segundo plano por tanto tiempo, de estar con las personas equivocadas, de ser vistos sólo como cuerpos efímeros o compañías simples.

Cuánto miedo podemos sentir y qué podemos hacer con él. Qué hacemos ante una mirada que te estremece el alma y te da miedo la desconfianza propia y la del otro.

Tengo miedo porque muchas veces me han visto el cuerpo y no me han explorado el alma, mi forma de pensar fue pasada por alto tantas ocasiones que me redujeron a una absurda pregunta: ¿qué eres: activo a pasivo? Historias de dolor que aunque se neutralicen los recuerdos, asusta demasiado por tanta incertidumbre.

Hombres que juran una fidelidad inexistente, un amor intenso y maduro que se acaba con el primer cuerpo que se ofrece y se antoja. Una vez sólo fui el amante que debía esconderse, abrazarse en lugares lejanos o cerrados y decir palabras a susurros que sólo eran mentiras. Alguna otra vez me celaron tanto que terminé enfermo de duda y de desconfianza, otras se enamoraron de mi y yo no pude por más que intenté
Fui compañía de soledades, levanté miradas de deseo, besé sin amor y me sentí vacío; desperté con alguien y sólo se levantó y se fue, estuvieron conmigo y fui el trofeo que se mostraba pero con el jamás se podía comprometer por miedo a perderse, estuve con quien no supo definir su sexualidad y mucho menos lo que tenía conmigo y fui violentado con silencio.

Palabras y palabras he escuchado y he construido castillos que terminan derrumbados, futuros que jamás se cumplen, lágrimas contenidas y a veces tiradas a mares, sentimientos que nacieron para morir rápidamente.

Pasé por momentos que dudé del amor, me marchité en vida, dejé de soñar en encontrar ese hombre que despertara conmigo cada mañana, que viajara conmigo, que me hiciera soñar, que no temiera abrazarme, ni decirme jamás lo que siente, que sea equitativo, que crea en mi, que me diga te amo y mi interior se estremezca y hasta hoy he pensado que mi forma de amar y sentir no es para este momento, que lo que espero no existe... lloré tanto que me sequé y hasta dejé de hacerlo.

Quise cambiar tantas veces, arrancarme al corazón para dejar de sentir; quise ser frío, quise no volverme a ilusionar y de repente llegas con tus llamadas que transmiten una voz segura y firme, una mirada tierna con ciertas murallas, y sueños que me aterran porque inevitablemente sé que podría visualizarlos contigo y que no sé si se lleguen a construir.

Temo, temo tanto a tu desconfianza, a tus historias de desencuentros, a tus papeles de segunda, a tus vidas entrelazadas. Sólo te pido que no mientas... porque no me voy a detener, no soy víctima de la vida.

Y recuerdo un poema de la gran escritora mexicana Cristina Rivera Garza en su excelsa novela Nadie me verá llorar:

Pero la historia de amor no empieza ahí.

Tuvieron que pasar días de sol y noches sin luna.

El azoro y la desconfianza tuvieron que pasar.

La lluvia.

Las ganas de salir corriendo.

El futuro. El pasado. Y lo que está justo en medio de ellos.

Para llegar al abrazo tuvieron que pasar ellos mismos.

¿Quieres vivirlo? ¿Quieres construir una historia sin tiempo

 

Llaves Rojas "El sentido de la Vida" | Sobre Llaves Rojas